martes, 5 de junio de 2012

Higiene postural en la escuela


La postura se adquiere por costumbre o comodidad, por lo que una buena educación contribuiría a mejorar los hábitos al caminar y sentarse. 


En el caso de los niños quienes pasan gran parte de su tiempo sentados en las aulas o viendo la televisión en sus ratos libres, la postura que adquieren puede determinar el desarrollo de futuras alteraciones de la columna vertebral. 



Además,   Schede (1971), advierten de la influencia sobre la postura de un tono muscular y ligamentoso débil, en las estructuras de soporte; "...la fortaleza muscular en los niños hace que se defiendan mejor de las posturas incorrectas habitualmente adoptadas". 

Ahora bien, la actitud postural no solo esta condicionada por el tono muscular o fortaleza de los ligamentos y músculos erectores de la columna vertebral, sino también por la personalidad del individuo. 

La depresión y el cansancio intelectual empeoran la imagen de la postura y, por el contrario, la alegría y el éxito la mejoran. 

La preocupación por la postura radica, en que las anomalías raquídeas constituyen una de las principales causas de consulta médica y ausentismo laboral en la edad adulta, por ello es importante poner más atención en las primeras edades así como en la adolescencia llevando a cabo, programas de prevención. 

Donde existe "obligación" de trabajar estos elementos desde las primeras edades es en el terreno educativo. Si se tuviera que elegir el periodo más óptimo de la vida del sujeto para la adquisición y modelado de conductas posturales éste sería la infancia. 

Ruiz Pérez (1994) señala que éste es un periodo de aprendizajes básicos. Si trabajamos desde la infancia hábitos saludables entre los que se encuentran los posturales, el niño/a los incorporará en su vida como una rutina más en la que su cumplimiento pasará casi inadvertido. 

En otras palabras, resulta mucho menos costoso, en tiempo y esfuerzo, educar desde la base en un estilo de vida saludable que tener que corregir más adelante conductas disfuncionales en sujetos a pesar de su corta edad. 


La idea es que los escolares observen y realicen una serie de actividades para comprender la necesidad de sentarse bien, frente a una mesa, frente a la pantalla del computador, de tomar adecuadamente bulto, bolso o morral y saber llevar peso sin que se dañe su columna vertebral, a realizar las tareas domésticas de forma adecuada para su espalda y musculatura, a subir y bajar escaleras correctamente, saltar, ir en bicicleta, tomar cosas ubicadas en zonas elevadas, etc., de una forma conveniente para su estructura ósea, y ampliar su conciencia de autocuidado postural en otros actividades cotidianas y básicas como son dormir e inclinarse al cepillarse los dientes. 







Consejos para proteger la espalda de los alumnos

mochila
La vuelta al cole de los más pequeños requiere de ciertos cuidados básicos para proteger su salud, sobre todo, para prevenir dolores de espalda entre los escolares que si no se frenan a tiempo, pueden desencadenar molestias crónicas.
La mayor parte de los dolores de espalda se pueden evitar con sólo tomar algunas medidas sencillas.
En primer lugar, tener una buena postura corporal es importante para prevenir dolores de espalda, y para ello, no sólo es de ayuda tener un buen soporte para la espalda al momento de estudiar, sino apoyar los pies en el piso, no estar largas horas sentados y además, mantenerse físicamente activo para tonificar piernas y musculatura que ayudarán a prevenir molestias.
Por otro lado, el peso que cargan los niños en sus mochilas es fundamental, ya que no deberían soportar más del 10% de su peso corporal.
Algunas de las alternativas es llevar carritos para las mochilas y así, evitar soportar a diario un peso en la espalda. Además, el uso de fascículos en lugar de libros grandes, enteros y pesados, puede ser de mucha utilidad para reducir el peso a cargar.
Más del 50% de los niños y casi el 70% de las niñas españolas ha sufrido dolor de espalda, por ello, se debe proteger el cuerpo y la salud de los más pequeños siguiendo éstos sencillos consejos que, además, no agotarán antes de tiempo a los escolares.